Sensores que avisan al conductor antes de que se salga de la calzada, sistemas que emiten automáticamente una llamada de emergencia cuando se produce un accidente… Esta tecnología ya existe y Bruselas quiere aplicarla en seguida a nuestros coches.
En caso de accidente, los automóviles emitirán automáticamente una llamada de emergencia al 112.
En concreto, estudian implantar en los coches distintos sensores que avisen al conductor cuando éste se encuentre a punto de chocar o salirse de la carretera. Sin embargo, su gran apuesta es el denominado “servicio de llamada de urgencia a bordo”: mediante un dispositivo incorporado al coche, se emite de forma inmediata nada más producirse una colisión un aviso localizable por el servicio de urgencia 112 sea cual sea el país de la UE donde nos encontremos.
Liikanen (consejero de Sociedad de la Información de la UE) ya se ha puesto en contacto con los fabricantes de coches (a través de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles) y, según ha afirmado, estos han recibido la noticia con notable entusiasmo.
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